Geopolítica de Asia Pacífico por Damián Jacubovich

Geopolítica de Asia Pacífico

Japón y su nueva geopolítica militar
Shinzo Abe es primer ministro de Japón desde diciembre de 2012.
La apuesta de adelantar las elecciones para Octubre del 2017 le ha dado buen resultado al primer ministro de Japón Shinzo Abe. El primer ministro conservador ha vencido en las elecciones legislativas celebradas este domingo en Japón y se convertirá en el más duradero de la historia japonesa de la posguerra.

También contará, según las proyecciones de los medios nipones, con una mayoría absoluta de dos tercios en la Cámara Baja, algo que le permitirá abrir el camino para la reforma de la Constitución pacifista ( aprobada tras la II Guerra Mundial y qué en el 2017 cumple 70 años), una de las grandes aspiraciones de su mandato. Con la reforma, Japón podrá tener un ejército ofensivo y no solo defensivo, como hasta ahora.

Vale recordar que este anhelo de reforma por parte de Shinzo Abe se produce en un contexto muy particular, es decir en plena etapa de tensión militar etapa de tensión militar en la península de Corea.

La Carta Magna, que hasta ahora nunca ha sido enmendada, fue escrita bajo la ocupación norteamericana tras la rendición de Japón y establece justamente en su artículo 9 la prohibición de ejercer cualquier acción militar si el país no es atacado previamente, lo que le ha impedido a Tokio tener hasta ahora un peso estratégico en la geopolítica internacional.

El primer ministro nipón, Shinzo Abe, dijo esta semana que este año es el momento adecuado para "dar un paso histórico" y reescribir la Constitución pacifista.

Abe citó "una situación de seguridad que se está gravando", en lo que parecía una alusión al clima de alta tensión que se vive desde hace semanas entre Corea del Norte y Estados Unidos.

Además, Abe considera que la Carta Magna japonesa está desfasada para hacer frente a un panorama regional en el que China gana cada vez más peso militar y se ha marcado como objetivo 2020 para que el país adopte un nuevo marco constitucional.

La reforma constitucional, que necesita ser ratificada por dos tercios del Parlamento y una mayoría simple en un referéndum, es un asunto espinoso que divide a la población nipona.

El Ejecutivo de Abe logró aprobar entre 2014 y 2015 una "reinterpretación" del artículo 9 de la Constitución, que solo permitía responder militarmente en caso de agresión, para que el país pueda ejercer el llamado derecho a la "auto-defensa colectiva".

Esta primera reforma militar en el país asiático desde el fin de la II Guerra Mundial, que entró en vigor el año pasado, permite a las Fuerzas de Autodefensa (como se llama al Ejército japonés) defender a aliados y prestarles apoyo logístico si son atacados o participar en operaciones de seguridad de la ONU.